Hace tiempo, en las casas o al aire libre, se contaban historias, leyendas, romances, refranes..., todos reunidos al calor de la lumbre; tal y como también se hace ahora. Os voy a contar una historia, algunos refranes y una poesía.
El pájaro y la zorrica
Eran un pájaro y una zorrica, los dos muy listos. La zorrica invitó al pájaro a comer sopa a su casa, él contento, aceptó.
Ya en su casa, la zorrica puso la sopa en un plato plano para que el ave no pudiera comer con el pico. La zorrica se tomó toda la comida con la lengua y el pobre pájaro se quedó sin probar bocado. Él, para vengarse la quiso invitar a su casa para comer migas.
Y al día siguiente, allí estaba la zorrica en una situación extresante; el pájaro puso las migas en un bote de cristal muy largo. La zorrica, muerta de hambre, no comío nada, porque ella no podía meter el hocico en el bote.
Tras unos días, el pájaro estaba todavía enfadado y le dijo a la zorrica:
-Zorrica, me han invitado a una boda en el cielo, por encima de las nubes, ¿te vienes conmigo?
Y ella le respondió:
-¡Si no puedo volar!
-Ya, pero te llevo yo.
La zorrica se montó en la espalda del pájaro y él empezó a volar. Cuando éste le preguntó:
-Zorrica, ¿ves el suelo?
-Sí, todavía lo veo.
El pájaro subió más.
-Zorrica, ¿ves el suelo?
-Sí, aún lo veo.
Subió mucho más.
-¿Lo ves ahora?
-Lo veo más chiquitillo, muy chiquitillo.
-¡Pues a por él vas...!
Le dió un vuelco y la tiró al vacío. Y mientras caía, la zorrica repetía:
-¡Si de ésta salgo y no muero, nunca más bodas al cielo!
FIN
Algunos refranes populares
Tradición oral
- Entre lo feo y lo hermoso prefiero lo más provechoso.
- Mejor mío que de mi tío.
- En este mundo nada dura, quien hoy tirita mañana suda.
- El heredero llora por fuera y canta por dentro.
- Más vale tarde que nunca.
- Año de nieves, año de bienes.
- Lo poco espanta y lo mucho amansa.
- No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy.
- Más sabe el diablo por viejo que por diablo.
- Alcalde nuevo y zapato nuevo solo aprieta a lo primero.
- Una madre y una hija cogen en una camisa.
- Más vale prevenir que curar.
El rosal florido de mayo
Yo me acerqué a un rosal
para coger una flor.
Aquella flor tan bonita
con aquel lindo color.
Entre esas hojas verdes,
el rosal fue y me pinchó
para que yo no cogiera
aquella preciosa flor.
para que yo no cogiera
aquella preciosa flor.
Me quedé allí mirando
para contemplar su olor.
Si pasas por un rosal,
nunca cojas una flor
que es la alegría
de su vida,
y el orgullo de su amor.
para contemplar su olor.
Si pasas por un rosal,
nunca cojas una flor
que es la alegría
de su vida,
y el orgullo de su amor.
Tradición oral
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